¡Hola creadora!. Como el perejil es una de las plantas aromáticas que más se usa en la cocina, debes saber cómo mantenerlo fresco por más tiempo. Por suerte, hoy aquí te daré unas pequeñas instrucciones, para que conserves el perejil un montón de tiempo. Siguiéndolas tal y como te las describiré te aseguro que no perderá su sabor, ni su delicioso aroma. ¡Mira hasta el final,  porque con este método el perejil estará igual de fresco, como si lo recién comparas en el supermercado!

Aprende A Conservar El Perejil Fresco Por Mucho Tiempo

No dejes que el perejil se ponga amarillo o se pudra dentro de la nevera. Una vez que lo traigas del supermercado lo mejor es que lo comiences a conservarlo de esta simple manera, siguiendo estas instrucciones. Estoy segura que me lo agradecerás, porque ahorrarás mucho tiempo en la cocina, y además no malgastarás tu dinero de ahora en adelante.  

¿Cómo conservar perejil picado?

Para conservar y congelar el perejil lo primero que tendrás que hacer es comprar un buen manojo, compra suficiente para que tengas de 1 a 3 meses en la nevera. Además necesitarás papel aluminio o papel film, un cuchillo afilado y una tabla de cortar.

Luego, cuando tengas todo listo, sigue estos pasos:

Paso 1

Comienza lavando bien el manojo de perejil.

Paso 2

Luego, corta las hojitas, separándolas de los tallos con cuidado. Lo mejor es que uses y conserves solo las hojas.

Paso 3

Ahora, toma el papel de aluminio y córtalo en trozos de unos cuatro o cinco centímetros de ancho. En cada trozo de papel aluminio vas a colocar un montoncitos de hojas de perejil y los cierras como si fueran sobres o paqueticos. Cuando ya hayas distribuido todo el perejil y tengas varios paqueticos mételos en el congelador hasta que los vayas a usar.

Modo de uso:

Cuando ya necesites utilizar el perejil solo saca uno o dos de los montoncitos que tienes congelado, destápalo y pica las hojas ligeramente con un cuchillo bien afilado. No necesitas descongelarlo con antelación.

Otra opción es colocar un trozo de papel aluminio más grande encima de una superficie plana y encima el perejil, luego lo enrollas, formas un cilindro y lo llevas al congelador.

Cada vez que necesites el perejil, corta trozos o ruedas del cilindro y lo demás lo sigues guardando en el congelador. De esta manera nunca te faltará el perejil en tus platos.

Eso sí, es importante que sepas que este truco para conservar el perejil solo te servirá para cuando necesites esta hierba picada. Las hojas o ramas enteras no te servirán para decorar los platos.

De esta misma manera, y con este mismo procedimiento puedes conservar otras plantas aromáticas como:  la albahaca, el cilantro, el perifollo. 

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